El amor es un suceso inevitable en la vida de casi todos los seres humanos, esto hace preguntarnos si realmente existe el “y vivieron felices por siempre”, pero también surge la duda de si el estar enamorados realmente nos hace ser más felices o sentirnos mejor, pareciera que sí, pero… ¿qué hay detrás realmente del amor?.
Varios estudios científicos han encontrado que suceden diversas reacciones químicas cuando estamos enamorados, incluso las diferencian de acuerdo a las etapas por las que pasamos al encontrar el amor:
1a. Etapa. Lujuria: en la que sentimos atracción por otra persona, ya que buscamos satisfacer los deseos sexuales y de procreación que tenemos como seres humanos, en esta etapa existen diversas reacciones químicas protagonizadas por los estrógenos y testosterona.
2a. Etapa. Pasión Romántica: considerada como la etapa más intensa, ya que en el cerebro la dopamina, noradrenalina y feniletilamina generan reacciones particulares que hacen que tendamos a pensar de manera irracional e idealizar a nuestra pareja.
3a. Etapa. Apego y Compromiso: última etapa del amor, en la que la oxitocina, las hormonas antidiuréticas y endorfinas comienzan a actuar, generando que se sienta una necesidad imperante de estar con nuestra pareja, se generan vínculos afectivos muy parecidos a los que tiene una madre y su hijo.
Por ello, podemos intuir que el amor no viene del corazón, sino del cerebro y de todas las reacciones químicas que se presentan en él, las cuales nos hacen sentir lo que sentimos (sí, esas ganas de regalar chocolates o pasar todo un fin de semana romántico sin separarnos de nuestra pareja).
Y al ser un proceso químico, también se generan algunos beneficios para nuestra salud, así que si aún no estabas convencido de darle una oportunidad al amor, aquí presentamos algunas razones que te harán pensarlo dos veces.
El amor ayuda a tener una presión baja. Se ha encontrado que las personas que están en matrimonios sanos y felices, tienden a mantener niveles adecuados en la presión.
El amor reduce la ansiedad y el estrés. Ya que las reacciones químicas producidas en las diferentes etapas del enamoramiento, ayudan con la atención, memoria y motivación, además las relacionan con el sistema nervioso autónomo, encargado de reducir el estrés.
El amor previene los resfriados. El estar enamorado, por las reacciones químicas que se producen, fortalece el sistema inmune, lo que hace más complicado tener enfermedades virales como los resfriados.
El amor aumenta la felicidad. Y todo se debe a la liberación de dopamina, que nos hace tener más pensamientos positivos y sentimientos placenteros y, básicamente, estamos felices.
En general, el amor hace que se tenga un mejor estado de salud y se aumente la calidad y esperanza de vida… después de conocer esto ¿no crees que vale la pena buscar el amor verdadero?.
Si aún no crees que vale la pena, o si quieres conocer a profundidad el tema, se han escrito varios libros que hablan sobre la química del amor, pero uno que lo hace desde una perspectiva romántica es el libro de Ali Hazelwood, “La Química del Amor”. O si prefieres pasar un rato con tu pareja frente a la televisión, está la película “The Female Brain” (La Química del Amor), de la directora Whitney Cummings, que narra los intentos de una neurocientífica por conocer cómo funciona el cerebro de los hombres y mujeres enamorados… hasta que ella se enamora.
